EL PAPEL DE UN PADRE

En esta segunda parte del capítulo 18 encontramos una declaración que Dios hace sobre la vida de Abraham respecto a su papel como padre, y esto nos habla a ti y a mí de este importante papel que Dios nos ha dado a nosotros también. Es tan importante y valioso, que Dios mismo se revela a nosotros como Padre porque la relación que nosotros tenemos con nuestros hijos tiene un gran impacto sobre la imagen que ellos tienen de Dios.

Quien crece con un padre ausente, lucha con poder conectar con Dios porque lo considera ausente también. Quien tiene un padre muy severo, gritón o violento, tiene la idea de que Dios es duro y severo de la misma forma. Esta es la razón de la importancia de nuestro papel como padre. En los versículos 17-19, el Señor declara unas promesas sobre la vida de Abraham, las cuales le hizo en base al papel que él debía desarrollar con su hijo Isaac.

En el capítulo 19, encontramos otro ejemplo de un padre, Lot. Pero esta vez no es un buen ejemplo de cómo un padre debe ser. Lot había hospedado a unos ángeles y cuando unos hombres de la ciudad (Sodoma), rodearon su casa en busca de ellos para violarlos, ¡él les ofrece a sus propias hijas para que hagan con ellas lo que quieran! Y tal vez dices, ¡Yo jamás haría eso! Pero al ser indiferentes a las necesidades de nuestros hijos, cuando no nos involucramos en sus vidas y no estamos atentos a quiénes son sus amigos, con quién hablan, qué ven o sus redes sociales, entonces estamos siendo igual que Lot.

El papel que Abraham y Lot desarrollaron como padres en la vida de sus hijos, determinó el futuro de estos y su relación con Dios. Hombre, tenemos que reconocer que uno de los papeles más grandes e importantes que Dios nos ha encomendado es el de ser excelentes padres. Padres que aman a sus hijos, que los animan y apoyan. Padres que están presentes en sus actividades, que los cuidan y defienden pero que también los disciplinan por amor.